¿Quién se acuerda de los tiempos en que los teléfonos tenían cables, los videojuegos eran máquinas recreativas e Internet chirriaba cuando querías usarlo? Pues bien, una exposición totalmente nueva en la Tate Modern nos transporta a aquellos días (y más allá), explorando el modo en que la tecnología ha influido y sigue transformando el mundo del arte, destacando artistas y obras increíbles de la era anterior a Internet.
Electric Dreams es una exposición alucinante que sumerge al visitante en un viaje a través de la era tecnológica, desde el mundo analógico del pasado hasta las maravillas digitales que conocemos, amamos y utilizamos hoy en día.
Sueños eléctricos: Arte y tecnología antes de Internet
Esta fantástica exposición abarca los inicios del arte digital a lo largo de cinco décadas -empezando por los años 50- e incluye hipnóticas instalaciones de vídeo, arte hecho a máquina, las primeras piezas informáticas y mucho más. captura la magia, la nostalgia y, en ocasiones, el inquietante impacto de la tecnología en el arte, la identidad y la conexión.
Electric Dreams explora cómo los artistas utilizaron herramientas de vanguardia para ampliar horizontes culturales e imaginar el futuro en el que vivimos. Destacan la Light Room (Jena) de Otto Piene, que envuelve al espectador en un «ballet» de luz continuamente magnífico, y el extraordinario dispositivo mecánico casero del británico-canadiense Brion Gysin, Dreamachine no.9, que es un viaje caleidoscópico en el mejor sentido posible.
Incluso hay exploraciones de los primeros días de la RV, que allanaron el camino para las tecnologías digitales actuales y las imperdibles experiencias inmersivas. Las obras de estos artistas destacan especialmente por ser de las primeras en adoptar estas nuevas tecnologías en sus experimentos y obras radicales.
Arte y tecnología se dan la mano en la Tate.
Así pues, para todos aquellos que se han pasado la vida siendo testigos de la rápida evolución de la tecnología y de su impacto intrínseco en el mundo del arte, Electric Dreams es una emocionante y obligada mirada al pasado; un pasado que ha tenido una increíble influencia en el arte moderno y contemporáneo y, sin lugar a dudas, en el arte del futuro.
Sueños eléctricos: Arte y tecnología antes de Internet se exhibe en la Tate Modern hasta el 1 de junio de 2025. La entrada general a la exposición cuesta 22 libras. Para más información y entradas, pulse aquí.