Sobre Bloomsbury se alza un imponente edificio cargado de fascinante historia que ha servido de inspiración a numerosos artistas desde su fundación en 1937. Diseñada por el legendario arquitecto Charles Holden, la Senate House es una imponente obra maestra art déco que se eleva 19 pisos sobre la capital.
El edificio fue concebido originalmente como edificio administrativo para la Universidad de Londres, que sigue siendo su uso actual, pero la vasta estructura, fortaleza, adoptó un papel diferente durante la Segunda Guerra Mundial, cuando se convirtió en la sede del Ministerio de Información.
La Casa del Senado y George Orwell
Su intimidante diseño monolítico y su uso en tiempos de guerra para la propaganda y la censura influyeron directamente nada menos que en George Orwell cuando escribía 1984. Tanto la arquitectura como el uso de la Casa del Senado guardan un fuerte paralelismo con los temas de control, vigilancia y manipulación que se encuentran en la querida novela distópica.
El libro está ambientado en Oceana, una fusión distópica de los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido, en la que varios ministerios desempeñan un papel clave en la trama, entre ellos el Ministerio de la Verdad, que reescribe la historia para adaptarla a las necesidades del Partido. Esto es muy parecido a cómo el Ministerio de Información controló la narrativa durante la Segunda Guerra Mundial, que se formó al día siguiente de la declaración de guerra de Gran Bretaña.
Un Ministerio de Información distópico
El Ministerio de Información es famoso sobre todo por la planificación de preguerra y la creación de los carteles «Keep Calm & Carry On», que se convertirían, más bien irónicamente si de Orwell se trata, en un símbolo de la cultura británica.
Tampoco es ningún secreto que el MOI se mantuvo en un principio en secreto para el público, todo ello mientras publicaba propaganda nacional, además de controlar nuestras noticias e información. A Orwell le llamó la atención esto, así como la sede elegida por el ministerio dentro de este inquietante edificio en el corazón de Bloomsbury, un barrio conocido por sus escritores e intelectuales.
Estas ideas se destilaron en 1984, donde los funcionarios del gobierno manipularían los registros históricos y reescribirían la verdad bajo el líder (y símbolo) del gobierno del libro, el Gran Hermano.
.
Sin embargo, no todo es pesimismo. Aunque es posible que Orwell viera la Casa del Senado con inquietud, también es profundamente admirada por su brillantez arquitectónica. El diseño de Holden combinaba el funcionalismo con elementos clásicos despojados, creando un edificio que era (y sigue siendo) a la vez moderno y monumental.
Hoy en día, sigue siendo una parte clave de la Universidad de Londres, así como un hito literario que se erige como testimonio tanto de los elementos oscuros como de los inspiradores del siglo XX, muy en paralelo al espíritu de nuestra bruñida ciudad. Así que, la próxima vez que se encuentre en Bloomsbury, recuerde mirar hacia arriba para ser testigo de este fascinante trozo de la historia de Londres.