
Llamando a todos los ratones de biblioteca, coleccionistas, bibliófilos y anticuarios, tenemos resuelto su próximo día en Londres… A la vuelta de la esquina de una de las zonas más concurridas de nuestra capital, se encuentra una joya literaria oculta que no querrá perderse.
Repleto de una veintena de librerías de segunda mano y anticuarios, Cecil Court es un paraíso para los amantes de la literatura. Sin embargo, es algo más que un impresionante número de tiendas reunidas en un mismo espacio. Las fachadas de las tiendas no han cambiado desde hace más de un siglo, por lo que pasear por Cecil Court es como hacer un viaje en el tiempo.
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Dentro de las tiendas, encontrarás de todo, desde libros raros y primeras ediciones hasta sellos antiguos, mapas, carteles y billetes. Se cree que es la calle que inspiró el Callejón Diagon de Harry Potter. Con sus excéntricas tiendas -algunas incluso asociadas a la literatura mágica o psíquica-, ¡es fácil creerlo!
Cecil Court a través de la historia
Qué le parece este pedigrí cultural: Cecil Court fue el hogar temporal de Wolfgang Amadeus Mozart cuando éste tenía ocho años y estaba de gira por Europa. La familia Mozart se alojó en casa de un barbero llamado John Couzin, y las entradas para los primeros conciertos de Mozart en Londres se vendieron en su tienda. Incluso hay una placa azul que conmemora su breve estancia. Al fin y al cabo, a los londinenses nos encanta reivindicar la fama con este tipo de humildes alardes repartidos por toda la ciudad. Incluso se rumorea que fue durante su estancia en Cecil Court cuando Mozart compuso su primera sinfonía. Nunca lo sabremos con certeza… ¡pero es una buena historia!
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Cecil Court fue también el centro de negocios de la primera industria cinematográfica británica, por lo que se ganó el segundo apodo, Flicker Alley. La primera empresa relacionada con el cine abrió en 1897, y Cecil Court se hizo rápidamente conocida como el lugar donde comprar o alquilar películas. Los pioneros del cine británico Cecil Hepworth y James Williamson tenían oficinas en la calle, junto con muchas empresas internacionales. Durante esta época, se abrieron todo tipo de negocios a lo largo del callejón; desde tiendas de equipos y empresas de alquiler hasta distribuidores de películas extranjeras, pasando por empresas especializadas en confitería cinematográfica.
Hoy en día, es simplemente una calle comercial impresionante y distintiva de Londres. Tanto si busca libros clásicos o monedas antiguas como si necesita completar su colección de arte, en Cecil Court encontrará la tienda adecuada. Incluso hay una tienda dedicada a Alicia en el País de las Maravillas.
📍 Encontrará Cecil Court justo al lado de Charing Cross Road, que lleva a St Martin’s Lane. La estación más cercana es Leicester Square.