En palabras del inimitable Ray Arnold de Samuel L. Jackson, agarraos bien. Al igual que los famosos dinosaurios, Jurassic World: La Experiencia volvió a Londres a principios de este año, y para este Half Term es más grande que nunca. Suena la melodía.
Los dinosaurios de este éxito de taquilla han vuelto a salir de la gran pantalla para ser contemplados en todo su esplendor, con dientes de aguja, cuellos largos o garras de agua, en un nuevo y épico recinto. Esta vez, la puerta de entrada al mundo del cine se encuentra en Battersea Power Station.
Ya se han vendido más de 180.000 entradas y, debido a la demanda popular, la experiencia ha añadido nuevas fechas para dar a todo el mundo la oportunidad de seguir los pasos de estos miles de asombrados visitantes. No se pierda la oportunidad de sacar el Alan Grant que lleva dentro y conocer de cerca a dinosaurios de tamaño natural, contemplar los especímenes atrapados en ámbar del laboratorio Hammond e incluso conocer a algunas crías de dinosaurio.
¿Dónde podrá encontrar Jurassic World: ¿La Experiencia?
Dirígete a la Central Eléctrica de Battersea y sigue los débiles rugidos y los estruendos que te pondrán la piel de gallina hasta llegar a unas enormes puertas de madera: no sería el Parque Jurásico que conocemos y amamos sin ellas. No cabe duda de que tarareará la icónica melodía mientras se abren para revelar el espacio de ocio de 28.000 pies cuadrados que se ha transformado en la naturaleza prehistórica.
El suelo aparecerá moteado por la luz del sol que ha brillado a través de una maraña de ramas, mientras que los helechos y las ramas frondosas brotarán de todos los rincones, dando la ilusión de que realmente se ha adentrado en los bosques milenarios del Jurásico. Busque dientes relucientes u ojos amarillos brillantes entre los arbustos: puede que sea usted quien mire, pero lo más probable es que haya algo escamoso observándole.

¿Qué le espera en Jurassic World: La Experiencia?
En su paseo exploratorio por Jurassic World: La Experiencia descubrirá todo tipo de delicias de los dinosaurios. Contemple al Brachiosaurus, que se alimenta de las copas de los árboles y es una de las criaturas más grandes que jamás haya vagado por la Tierra; acérquese (si se atreve) a las astutas chicas del nuevo corral de rapaces y visite al Tyrannosaurus Rex, donde podrá ver con sus propios ojos esa sonrisa que aplasta los huesos. Cada uno de los increíbles dinosaurios que rugen y se mueven ha sido recreado con fascinante detalle, para que puedas contemplar de cerca cada escama, cada garra puntiaguda y cada cuerno dentado sin perder ni un ápice de realismo.
No todo son mandíbulas mordaces y miradas mortales, algunos adorables habitantes de ojos muy abiertos harán las delicias de visitantes de todas las edades. Puede hacerse un selfie con una cría de rapaz, un pterodáctilo o incluso el querido Bumpy (un Anquilosaurio) del Campamento Cretácico. Además, podrá echar un vistazo a las pequeñas crías de Parasaurolophus en sus incubadoras.
Jurassic World: La Experiencia es una visita obligada para los fans de la taquillera franquicia cinematográfica. No sólo puedes ponerte en las botas salpicadas de barro de Owen Grady (o si te apetece un reto, en los tacones blancos un poco más precarios de Claire Deering) mientras te sumerges en escenas interactivas inspiradas en las películas de éxito, sino que también puedes ver dónde empezó todo: El laboratorio de creación de Hammond.
Dentro, descubrirás cómo los genetistas descubrieron el secreto para devolver a la vida a estas criaturas prehistóricas. Una pista: todo se reduce a cierto mosquito que fue enterrado en ámbar hace tantos años. Consiga ya sus entradas para ser uno de los primeros en descubrir este mundo de dinosaurios a la vuelta de la esquina.


